E as crianças, Senhor?
Ainda a propósito da deplorável novela nacional do momento, sugiro esta sábia reflexão de Rosa Montero no El País. E destaco este parágrafo, que resume o principal:
"Demasiadas veces los progenitores feroces y abusivos son personas aparentemente normalísimas, ricas, asentadas socialmente y exitosas, como Bretón o como serían los padres de Asunta si se demuestra su culpabilidad. De modo que soy sincera cuando digo que, paradójicamente, tal vez Bourdin sea un padre maravilloso. Pero esa frase final del documental me hizo pensar una vez más en la incoherencia de nuestra sociedad. Necesitamos hacer test psicotécnicos para sacar el carnet de conducir, y también, como es lógico, para adquirir un arma. Pero, ¿para tener hijos no se pide nada? ¿Para esa responsabilidad tan colosal, para dejar a una criatura totalmente indefensa sometida a lo que puede ser el horror más completo, no hay que hacer ni una prueba? Todos esos combatientes antiabortistas tan activos deberían trasladar sus energías en defender a los niños, en vez de a los fetos. Que no sacralicen tanto a la familia, que puede ser estupenda, desde luego, pero que también puede ser un entorno peor que Auschwitz. Algo habría que hacer para defender a los críos."